Sin ganador claro
 
El segundo debate presidencial no arrojó un  ganador contundente y ahora los dos principales candidatos, Felipe  Calderón y Andrés Manuel López Obrador, que continúan cabeza a cabeza  en la preferencia del electorado, comienzan la recta final de sus  esfuerzos para ganarse el voto de los indecisos.  
  Al igual que en el post dedicado al primer debate, las ideas a continuación expuestas son sólo mi punto de vista acerca de la forma  en la que los candidatos presidenciales se vieron en este último  debate. De ninguna manera se trata de influir hacia el voto de algún  candidato u otro, sólo se pide que se vote por el Doctor Simi, al cual  el IFE no le permitió la entrada al debate, incluso trayendo su atril  y silla.  
 
 - Patricia Mercado se vio más decidida esta ocasión, al  mencionar en varias ocasiones a los “partidos de siempre”, aunque el  nerviosismo parece haberle ganado sobre todo en los primeros minutos  del debate. Intentó hacer mucho énfasis en las mujeres, pero le salió  mal. Decía “El candidato que gane” pero olvidaba la segunda parte “o la  candidata” más de una vez, se enfocó en las minorías, sacando a flotes  historias un tanto absurdas siguiendo su tan conocida línea. Esta vez  sencillamente desilusionó.  
  - Roberto Campa resultó estar más perdido que en la ocasión  pasada. Estaba menos nervioso pero sus intervenciones resultaron  totalmente aburridas. Estuvo tan fuera de lugar que empezó a hablar de  reelección. Su cierre fue una auténtica patada de ahogado; pidió que se  le diera uno de tres votos a Nueva Alianza.  
  - Roberto Madrazo llegaba con muchas expectativas. A tan poco  tiempo de las elecciones y estando en tercer lugar, tenía mucho qué  ganar y poco qué perder. Pero como ha sido costumbre, tanto su campaña  como su personalidad y su historial no pudieron hacer nada por él.  Intentó atacar a Calderón acusándolo de plagio de propuestas que  estaban en su libro y le salió contraproducente. Lo menos que se puede  decir de él es que estuvo muy bien asesorado.  
  - Felipe Calderón iba con una clara postura de no equivocarse y  lanzar algunos ataques a López Obrador. En sus primeras dos  intervenciones se le notaba nervioso y su voz se quebraba en momentos.  Expuso sus propuestas enlistando unos muy criticados puntos, pero que  resultan muy útiles para la memoria, tanto del que los dice como del  que los escucha. Se defendió de ataques de López Obrador y de Madrazo  de una forma moderada, sin perder mucho tiempo. De la misma forma que  Madrazo, se le notó muy preparado para el debate, aunque de cierta  forma pudo haber hecho más.  
  - Andres Manuel López Obrador se dignó de ir al debate. Su  estrategia era clara desde un comienzo, tomando en cuenta que no es un  excelente orador ni es conocido por su rapidez mental, él iba a recitar  lo que le habían planeado e intentar mostrarse tranquilo. Al comienzo  desconcertó, estando muy tranquilo e incluso no hablando como de  costumbre. Atacó a Calderón con un supuesto fraude fiscal, que será de  lo que se hablará de aquí al 2 de julio. Al final de descompuso de  forma increíble; se le notaba cansado, hablando con su típico acento e  incluso con color rojo en su cara. Basado en la estrategia que le  formaron los asesores, no se defendió y sólo fue a decir lo que tenía  que decir.  
  
 No concuerdo con la idiota idea de Tu Rock Es Votar de votar porque sí. La esencia de la democracia es elegir a nuestros gobernantes de forma premeditada y conciente, tal vez no resulte la solución de los problemas, pero si ni siquiera vamos un domingo cada dos o tres años a tachar una papeleta, qué podemos esperar de nuestro país?