Ser profesional en un videojuego ya es una realidad, estos tipos se entrenan horas diarias para ser los mejores en competencias mundiales… como los deportistas de verdad. Tal es el caso de Diago, probablemente el mejor jugador de Street Fighter en el mundo. En una de estas competencias se vio en inferioridad en el decisivo tercer round, con casi nada de energía y el rival casi lleno. El final es totalmente inesperado.

Y el público se levanta y aclama al héroe… momento freak inolvidable.